Corrupción en la alta posguerra
Soles negros
Ignacio del Valle
Alfaguara
360 páginas | 18,90 euros
La novela de investigación criminal es en nuestros días un cascarón que acoge los más variados materiales, desde la pestilente actualidad hasta el rescate de tiempos pretéritos. Ignacio del Valle ha acotado un territorio peculiar en el ámbito del relato mestizo históricopoliciaco. El escritor asturiano ya ha publicado tres obras emplazadas en la alta posguerra española y en la segunda conflagración mundial. Siguen un hilo cronológico progresivo (las respectivas peripecias ocurren en 1939, 1943 y 1945) y su protagonismo recae en un oficial, Arturo Andrade, y un soldado, alias Manolete, de la División Azul. La pareja continúa en Soles negros. Ambos personajes han vuelto a España después de crudas experiencias en Rusia y Berlín y se topan con el robo y compraventa de niños, hijos de republicanos, en los primeros lustros de la dictadura. El caso surge con el asesinato de una niña en Pueblo Adentro, aldea cercana a Badajoz, que Andrade, miembro de los servicios de información, y Manolete investigan siguiendo las pautas consabidas de un esquema clásico de la novela negra, el detective y su ayudante.
El esclarecimiento de la red mafiosa que rodea el crimen constituye la línea central de Soles negros y apunta por elevación a un retrato de lo más sórdido del franquismo, la impunidad con que la ideología recubrió las vilezas de los vencedores. La anécdota tiene base histórica real e Ignacio del Valle la aprovecha para relatar con pormenor una corrupción institucional que abarca a autoridades, jueces o religiosos. Pero va más allá de ese ámbito específico y lo inserta en una implacable estampa de época donde ocupan parcelas colindantes el idealismo suicida del maquis anarquista, el encallecimiento de las fuerzas del orden público, el matonismo de los acomodados, el instinto vengativo del pueblo, el sufrimiento sin esperanza de los derrotados, las disensiones dentro del Régimen… El planteamiento general de la novela responde al reciente movimiento de exhumación de la llamada memoria histórica desde una postura cercana a la literatura de denuncia. Documento o, mejor, alegato social y thriller criminal conviven con una historia de pretensiones psicologistas y pujos filosóficos. El ayer novelado con proyección moral en el presente al mostrar la vil condición humana.
El diseño formal de Soles negros recoge recursos de la narrativa popular con suspense, sorpresas, situaciones de brutalidad impactante, mentes enfermas de maldad, dolorosas claudicaciones e idealismo derrotado. Ignacio del Valle persigue un best-seller digno y de calidad y si un narrador tan bien dotado como él no llega a la altura literaria al alcance de sus manos se debe a que hace excesivas concesiones a la novela de consumo.