Mujeres y hombres de letras tomar
1. Sonsoles Ónega. →2. Eva Díaz Pérez. →3. Cristina López Barrio y Pilar Eyre. →4. Najat el Hachtmi. →5. Marwan. →6. Un momento del coloquio ‘¿Qué pasa en el mundo?’, moderado por Mabel Mata, con Ramón Lobo, Antonio Pampliega y Pedro Baños. © LUIS SERRANO
Mónica Baños gana la sexta edición del Premio Literario “la Caixa”/Plataforma de novela juvenil
El galardón tiene una dotación de 3.000 euros e incluye la publicación de la obra premiada dentro del sello juvenil Plataforma Neo
En un acto celebrado en CaixaForum Barcelona, el director del centro, Valentí Farràs, y el director de Plataforma Editorial, Jordi Nadal, han entregado el Premio Literario “la Caixa” / Plataforma de novela juvenil a la escritora Mónica Baños. En su sexta edición, el certamen ha recibido 247 novelas de 20 países distintos, escritas por autores de entre 14 y 30 años en lengua castellana y catalana. Mónica Baños, de 22 años, ha ganado la sexta edición del certamen por Donde desaparecen las estrellas. Además de los 3.000 euros del galardón, la autora verá su obra publicada en el sello juvenil Plataforma Neo.El jurado, formado por el escritor Francesc Miralles; Isabel Fuentes, directora del CaixaForum Madrid; y Jordi Nadal, director de Plataforma Editorial, ha premiado a esta joven autora por la sensibilidad y la dulzura a la hora de hablar de temas como la familia, el amor y la amistad, pero también de la muerte, la frustración y la búsqueda del equilibrio entre el apego a la familia y la necesaria independencia.
La novela está ambientada en Melía, la ciudad de las estrellas, una ciudad que se caracteriza porque existe la creencia popular de que las estrellas pueden influir en las vidas de sus habitantes. Gala tiene 19 años y siempre ha creído que las estrellas la ayudan en la relación que tiene con su hermana y el abuelo Clemente, y a cuidar de su sobrino Tadeo. Hasta que su mejor amigo de la infancia vuelve y con él todo el dolor que le causó su despedida. Néstor será clave para que Gala entienda la vida y las estrellas de forma distinta, pero no será el único obstáculo que encontrará. De repente, empezarán a salir a la luz secretos de su familia que harán que se tambalee todo aquello en lo que ella siempre había creído.
Mónica Baños (Sabadell, 1996) es estudiante de Derecho, pero su verdadera pasión siempre ha sido la literatura. Lleva creando historias desde los 5 años, aunque Donde desaparecen las estrellas será el primer libro que publique. Además, confiesa que le encanta el cine (si es clásico, mejor), aprender idiomas y viajar.
La Fundación Bancaria “la Caixa”, presidida por Isidro Fainé y dirigida por Jaume Giró, ha incrementado este año 2018 el presupuesto para su Obra Social, que se sitúa en 520 millones de euros. Esta dotación posiciona a la entidad como la primera fundación privada de España y una de las más importantes del mundo. El desarrollo de programas sociales focalizados en los grandes retos actuales, como el desempleo, la lucha contra la exclusión o el acceso a la vivienda, siguen concentrando buena parte de los esfuerzos. El grueso de la inversión, el 59% del presupuesto, se destina al desarrollo de programas sociales y asistenciales; el 18% a la investigación y la concesión de becas, y el 23% a la promoción de la cultura y la educación. El apoyo al conocimiento sigue siendo una de las señas de identidad de la institución, con actividades como las que impulsa conjuntamente con Plataforma Editorial y que promueven la transformación social a partir de la acción cultural.
Plataforma Editorial es una editorial independiente fundada en 2007 con el fin de publicar libros con autenticidad y sentido. Su catálogo cuenta con más de 700 títulos, muchos de ellos relacionados con ámbitos temáticos como la educación, la salud, la empresa y sus valores, el deporte, el liderazgo y la innovación. Desde sus inicios, la empresa destina a distintas ONG el 0,7% de las ventas de todos sus libros, y desde 2013 planta un árbol por cada título publicado.
Leer en Círculo
Después de cumplir 55 años, el club edita su revista número 300
En España no se lee”. Hace más de medio siglo esta frase era más que un tópico. Era un convencimiento arraigado, algo que siempre había sido así y que, en definitiva, parecía no tener remedio. En 1962, un grupo de entusiastas desafiaba esa idea. Ellos preferían recorrer las calles con su propia pregunta: “¿Le gusta leer?”, un gancho comercial que solía ir acompañado de una sonrisa. La frase que abría puertas en la España de los sesenta, y también en la de hoy, a Círculo de Lectores.Hasta entonces los libros eran objetos teñidos de prestigio pero, en cierta medida, ajenos a la vida cotidiana de muchas personas. Sin embargo, toda una generación de hijos de la posguerra, millones de padres y madres, estaban decididos a que sus propios hijos tuvieran un futuro mejor, con más oportunidades. Y tenían muy claro que para eso había que leer. Volvemos a los lemas: “Un libro ayuda a triunfar” era más que una frase hecha en la España de aquellos años.
Círculo les llevó los libros a casa. Formó millones de pequeñas bibliotecas privadas, una pieza fundamental en lo que Vázquez Montalbán llamó la educación sentimental de España. Y lo hizo con un sistema único, que estaba basado en un concepto que, todavía hoy, no ha sido superado: el contacto humano. La red de agentes de Círculo, convertida ya en parte de nuestro imaginario colectivo, ha sido y es parte esencial de su éxito.
Círculo de Lectores —para muchos, todavía, simplemente el Círculo— ha cumplido cincuenta y cinco años de existencia. Su revista alcanzará este verano el número 300. Y las cifras de su historia impresionan, desde cualquier perspectiva, en un sector como el editorial. Más de ocho millones de hogares españoles han sido en algún momento socios de Círculo de Lectores. El club ha vendido en todos estos años casi 500 millones de libros.
Si las cifras hablan por sí mismas, los títulos de los libros más vendidos en Círculo también nos dicen mucho: El código da Vinci (651.000 ejemplares), Cien años de soledad (580.000) y La Comunidad del Anillo (554.000). Tres formas de entender el arte de contar historias, al alcance de todos.
Una de las filosofías del club, y quizá la clave de su éxito, ha sido enlazar la cultura con mayúsculas con el ocio popular. Desde su fundación, Círculo ha estado en el centro de la vida cultural —con joyas como la Biblioteca Universal o las obras clásicas ilustradas por grandes artistas como Barceló o Saura—, con varios premios en reconocimiento a la calidad de sus ediciones. También ha contado con la presencia como socios de honor de autores como Vargas Llosa, Octavio Paz, Camilo José Cela, Rafael Alberti, Julio Caro Baroja y Miguel Delibes; o de personalidades como Adolfo Suárez, Mijaíl Gorbachov o los propios Reyes de España (los actuales y los eméritos). Todo ese bagaje esta detrás de cada uno de los agentes cuando se presenta en la casa del socio, con un carrito lleno de libros.
En la era de la imagen de consumo rápido, de la inmediatez, de la información fragmentada, del vídeo y del tweet, uno puede caer en el fatalismo de imaginar un futuro sin libros. La existencia de Círculo, después de más de medio siglo, nos dice que las tecnologías, las modas y los formatos pueden cambiar, pero que la pasión por la lectura está aquí para quedarse. Volviendo una vez más a los lemas, es un buen momento para recuperar el que utilizó el club para conmemorar sus cincuenta años: “Nos queda mucho por leer”.