Los amores imperfectos de NY
La bella cubana
José María Conget
Pre-Textos
204 páginas | 19 euros
A José María Conget le encanta dar vueltas a un pasado de cines, de tebeos, de canciones y de libros: avanza un paso tras haber retrocedido dos, como si necesitase sedimentar el arsenal de su imaginación. La bella cubana es una novela que concibió hace doce años, cuando vivía en Nueva York y trabajaba en el Instituto Cervantes. En cierto modo, el narrador que es y el funcionario entusiasta que fue aparecen en el libro, inspirado en una melodía de José White, que popularizó Lecuona y que Fernando Trueba incorporó a la banda sonora de Chico y Rita.
El escritor, que se mueve con pareja comodidad en la novela y en el relato (ahí están dos libros recientes como La ciudad desplazada, 2010, y La mujer que vigila los Vermeer, 2013, ambos en Pre-textos), aborda aquí la historia de dos jóvenes, Lara, o Larissa, y Gustavo, que se trasladan a Nueva York, cargados de proyectos. Ella encarna la inocencia y la pasión; él es escritor en ciernes. Su existencia pronto se verá agitada por otros personajes: la de ella por Rubén, un escritor más o menos vencido con un pasado secreto que se convertirá en su protector. Y la vida de él será sacudida por la profesora Nilda, latinoamericana, que conoce los horrores de las dictaduras latinoamericanas. En esas convivencias cruzadas irrumpirán nuevas pasiones, los celos, la autodestrucción, el vendaval imparable de la memoria con sus añoranzas y sus paraísos. Una historia, compleja y con fugas, que cuenta Conget con voces muy elaboradas y sutiles, de aroma faulkneriano, que convierten la novela en un libro sobre el amor y la ruptura, el dolor y el remordimiento.