Los arañazos del tiempo
Tu rostro con la marea
Fernando García de Cortázar
Martínez Roca
XII Premio de Novela Histórica Alfonso X el Sabio
448 páginas | 21, 90 euros
El tiempo es una zarpa certera que siempre atrapa al hombre. No hay quien haya vivido que no luzca sus arañazos. Tu rostro con la marea es una novela sobre las heridas del tiempo, que recorre el siglo XX a través de los surcos que los años han dejado en las vidas de sus personajes. Un relato coral con el paso de la existencia como protagonista; una lección de Historia, un paseo por el momento en que cambió el curso de la Humanidad y el mundo perdió la inocencia y cambiaron los ritmos. Desde entonces todo se hizo vertiginoso y superficial, frívolo y convulso. Su lectura invita a parar, apearse del mundo por un momento y detenerse a contemplar su rotación.
Fernando García de Cortázar (Bilbao, 1942) parece haber hecho resumen de su exitosa carrera como ensayista histórico, con más de sesenta títulos publicados —muchos de los cuales han alcanzado la condición de best-seller, en su acepción cuantitativa—, con esta novela que supone su debut en la ficción y por la que ha ganado el Premio de Novela Histórica Alfonso X El Sabio 2013. En esta primera incursión, tira de oficio y parece querer convencernos de que no hay novela no histórica, desde el momento en que la ficción ejerce su poderosa habilidad para la reconstrucción del pasado, pues la Historia se entiende, de qué manera si no, como una extraordinaria crónica de aventuras. En Tu rostro con la marea, García de Cortázar construye, deteniéndose con parsimonioso mimo en cada una de sus piezas, un gran mosaico de España y de Europa en el siglo en el que dos guerras descomunales la golpearon con furia en el costado. Para ello, el historiador despliega todo su conocimiento con la ayuda de tres personajes carismáticos —tres generaciones, de nuevo el tiempo como protagonista— que viajarán del Bilbao de principios de siglo al Madrid de pensiones galdosianas y tertulias literarias; del San Petersburgo de los últimos zares a la Varsovia de entreguerras; de La Habana a Bucarest, de Buenos Aires a Roma. Sin traicionar el rigor, el autor se atreve finalmente, ya en la madurez de su carrera, a unir el relato ensayístico con una voluntad de estilo encaminada a conmover al lector, a instruirlo a través de una acertada combinación de hechos reales con personajes ficticios muy bien construidos, de personalidades complejas y muchas aristas; a hurgar en ciertos acontecimientos históricos como el que investiga un crimen y, en definitiva, a dotar a lo académico de tensión dramática.
Fernando Urtiaga es un joven historiador, cura progre interesado por la literatura en el Bilbao de finales de los setenta. Con este personaje y en otra coyuntura histórica apasionante, la Transición española, arranca el relato, que irá viajando hacia el pasado gracias a la relación del narrador con su mentor, un hombre de gustos refinados y cultura enciclopédica quien, a su muerte, le deja en herencia el encargo de contar la historia del enigmático escritor Ángel Bigas —que recorrió la Europa de entreguerras como diplomático, espía y traficante de armas—, a través de la memoria de las personas que lo conocieron.
Con este punto de partida, García de Cortázar —Premio Nacional de Historia en 2008— construye un relato en el que despliega todo el repertorio de recursos expresivos que había manejado ya antes en su trabajo como historiador, alejado de la erudición inútil pero fuertemente abrazado a su formación humanística y académica.