Hijos de Santiago Rodríguez
Plaza Mayor 22. Burgos
Hace ya 165 años que nuestro antepasado Santiago Rodríguez Alonso cumplió su sueño de abrir en Burgos una librería en plena calle Laín Calvo, donde residía la burguesía de la ciudad y que contaba con muchas escuelas en esa época. La librería más antigua de España, y la quinta más antigua de Europa, comenzó como librería universal y poco a poco realizó pequeños trabajos de impresión en colaboración con otros impresores de la época. Hacia el año 1874 adquirió la máquina impresora más moderna del momento, la Minerva (casualidad que es nuestro anagrama, diosa de la sabiduría) y con ella comenzó a editar. Su catálogo, cada vez más extenso, viajó mucho y conoció a un sinfín de autores de su tiempo con los que empezó a trabajar asiduamente. Pero Santiago entendía que para que una nación pueda leer primero tiene que aprender a hacerlo y por ello centró su esfuerzo en crear libros escolares.Seis generaciones después seguimos conservando el mismo sueño. Y al igual que Santiago y sus sucesores, nosotras, queremos seguir difundiendo la literatura. La primera apuesta que hemos hecho desde que entré como gerente ha sido arraigar la idea de la lectura como pilar de nuestro crecimiento y la base de cualquier librero/librera y por ende nuestro lema, desde los inicios es “La escuela redime y civiliza”. Desde entonces y a pesar de haber desaparecido la casa editorial, seguimos con la misma idea, difundir la cultura.
Queremos recomendar La sonrisa etrusca de José Luis Sampedro por la calidez y la humanidad que desprenden sus personajes. La luz que no puedes ver de Anthony Doerr, Premio Pulitzer de ficción 2015, por su impecable estilo y capacidad de adentrarnos en las Segunda Guerra Mundial y A flor de piel de Javier Moro, una historia de exhaustiva documentación y una preciosa lección de superación.